No me gusta hacer las cosas en balde, y de hecho nunca las hago. Cada cosa que hago es porque creo en ella, porque estoy segura que merece la pena... porque no me gusta dejar pasar nada, porque todo merece la pena y porque siempre todo sirve para algo, pero... ¿qué ocurre si todo tu empeño en algo es inútil?, ¿si te sientes inferior porque lo que haces ves que no vale de nada, ¿si parece que nada se valora?...
Me gusta llegar al fin de las cosas, me gusta alcanzar mis límites, terminar la carrera en la meta y con la cabeza bien alta, pero también me gusta que sirva de algo, a mí también me gusta que estén conmigo y se me valore.
Creo que es hora de cambiar, de dejar de ser la tonta de siempre que da y no recibe... creo que debo aprender a valorar más a los míos, a los que realmente se que están por y para todo, día a día... a los que no hace falta llamar ni pedir ayuda para saber que están a tu lado... he de empezar a restar importancia a todo ello que no merece la pena...
Lástima tener que darme cuenta de todo cuando la caída ya me la he pegado, pero la vida es así, no importa las veces que te caigas sino las que te levantas...
No pido "gracias", una sonrisa me basta. No pido alabanzas, ni mucho menos, pido hechos...
Tampoco quiero que se me de cuando lo pido, busco que salga de cada uno...
=)
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